Alberto se mete fuerte en la crisis de la provincia

El peronismo comenzó a pedirle a Alberto Fernández que se involucre más en la situación política de la provincia de Buenos Aires, para ordenar la crisis iniciada por las tomas de tierras en el Conurbano y la rebelión de la Policía Bonaerense.

Alberto presentó hace sólo cuatro días un programa de fortalecimiento de la seguridad en la provincia y 72 horas después, la Bonaerense se rebeló en varios distritos. En la provincia no son pocos los que creen que de hecho, el disparador de la protesta fue el anuncio del plan, que no incluyó ninguna recomposición salarial para los actuales efectivos. Ahora, con la protesta lanzada, esta se mantiene aún después que el gobierno bonaerense anunciara aumentos salariales.

Los intendentes y algunos ministros le piden al presidente que ejerza un rol más activo en el territorio más poblado del país y ejerza su liderazgo para ponerle fin a conflictos que permanecen irresueltos.

Peleados con Sergio Berni, a quien quieren desplazar del ministerio de Seguridad, los intendentes creen que al gabinete de Axel Kicillof le falta volumen y experiencia en conducción política para surfear este tipo de crisis que no pudo anticipar. Por eso piden que el presidente colabore desde su rol de jefe político.

En paralelo, Buenos Aires sigue siendo por lejos la provincia más afectada por la pandemia. Este martes sumó casi 7 mil contagios y ya acumula 303 mil, más que países enteros como Italia -de los más afectados en la primera ola del virus- o Alemania. 

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